Tiza Mojada

Si aceptarás estar conmigo, si un día recordarás las fantasías de los
17, las conversaciones, el deseo de que fueras el primero, si la
ilusión superará tú realidad, de la mujer en fuga, talvez tendríamos
un par de días de felicidad, sólo eso un par de días infinitos, aunque
venga el dolor y el olvido, preferiría un par de días con vos que
ninguno, déjame invertir el dinero como si fuera yo quién viajará,
dame y date la oportunidad de ser feliz por dos días, infinitos,
inmutables, después vendrá el dolor y la añoranza, pero que nos
importa, cuando mi boca haya besado tú boca, y nuestros cuerpos se
hayan confundido en el deseo ancestral de verte a los ojos, desnudo,
desnudos. Déjame acercarme por primera vez, déjate acercarte y no
pienses, siente, en medio del dolor siente la promesa. Después
abandoname y olvidame. Que importa, prefiero haber vivido unas pocas
horas junto a ti que ninguna.

Etiquetas: cartas de amor

Desde la infinita desconexión... cansada, yerta, te leo... te leo y suspiro, una lágrima se asoma y el nudo que soy se funde en mi garganta. Te agradezco cada letra, cada palabra, cada frase de tus dedos de tinta, me devuelves a esa semana hermosa en que prófugos de nuestra soledad decidimos intentar, probar, arriesgar. Una semana en que consciente de mis alas rotas quise empreder un vuelo no hacia tí, sino contigo, pero me di cuenta que aún mis heridas no sanan y necesito permanecer en tierra hasta curarme, no quiero descender en el camino, quiero saber que no voy delante ni detrás de tí, quiero sentirte en paralelo... pero vos vas adelante y no logro alcanzarte hasta sanar mis alas... perdoname por no alcanzarte, por volar más despacio, pero lo necesito.
Sólo quiero que nuestro contacto no se pierda, necesito saber que cuento contigo, porque conmigo ya cuentas.

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